El concreto es unos materiales para construcción en Monterrey y en el resto del mundo más importantes en nuestros días, pese a las innovaciones en el sector. Destaca por su amplia variedad de aplicaciones y los tratamientos que le permiten obtener el comportamiento estructural requerido para cualquier obra. Entre los tipos de concreto que más se demandan para optimizar tal comportamiento, destaca el hormigón postensado.
Anteriormente, ya habíamos hablado un poco acerca de él, específicamente, hablamos acerca de las diferencias entre las viguetas pretensadas y postensadas, pero en esta ocasión queremos enfocarnos en el concreto postensado, que se usa principalmente en estructuras con separaciones notables de los apoyos o que soportarán altas cargas y que destaca por su excelente resistencia a la tracción, algo conveniente en ciertos proyectos, aunque, como mencionaremos, es preferible el concreto pretensado.
Este tipo de concreto usado ampliamente en varios materiales prefabricados en la construcción podría entenderse mejor como un método de presfuerzo surgido hace dos siglos. Conlleva la utilización de un torón de acero extruido para que no haya adherencia con el hormigón tras el fraguado. En general, el proceso implica el sometimiento del elemento a fuerzas contrarias a las que generan las cargas operativas, de modo que se incremente su capacidad.
Conlleva la utilización de cables tensados y anclados a las estructuras mediante elementos especiales. Casi toda la armadura produce esfuerzos mecánicos extra que establecen la pauta con aquellos que producen las cargas operativas, mientras que el porcentaje restante funge como sujeción. Entre los tendones utilizados para formar la armadura de metal, pueden ser varillas de acero, cables en tornos o alambres atados y paralelos. Dicha armadura se coloca en la fase de encofrado y su tensado provoca los esfuerzos de compresión recibidos por el hormigón.
Cabe agregar que son medidas la elongación del acero y la presión del gato para evaluar la tensión. Usualmente, los tendones son tensados de forma simultánea e, igualmente, es posible hacerlo con un gato monotorón. Entre las características principales de este método usado en varios materiales para construcción en Monterrey destacan:
Hay dos formas para este propósito:
En este caso, se crea una sección monolítica. Para ello, son rellenados a presión los conductos de la parte activa con material altamente resistente, de modo que haya buena adherencia y evitando los daños por corrosión.
Para este sistema, los conductos no se rellenan. En su lugar son conectados los cables tensados al concreto con las cabezas de anclaje. Usualmente, los torones son recubiertos con aceite y se almacenan en conductos plásticos para que cumplan su ciclo de vida.
El potensado se usa en prefabricados de concreto en Monterrey, en elementos fabricados en sitio o estructuras que recibirán altas cargas o con amplias separaciones en las luces o apoyos. Entre sus aplicaciones destacan:
Actualmente, hay varias edificaciones construidas con base en concreto postensado, por ejemplo, los puentes de Saint Petersburg en Rusia o el Grant Pass en EE.UU. Se trata casos que reciben cargas continuas y que no presentan deformación o agrietamiento gracias a la técnica, permitiendo que sean seguros para conductores y peatones.
La técnica del postensado ofrece algunos beneficios, por ejemplo, permite construcciones sostenibles al usarse en materiales prefabricados. Tiene buena resistencia mecánica y no requiere tanto mantenimiento, aunque si es necesario proteger la armadura para evitar la corrosión. Tiene una buena vida útil al usarse en edificios y puede utilizarse en zonas altamente sísmicas; sin embargo, presenta algunas limitaciones que hacen que muchas constructoras prefieren el concreto pretensado.
Una de sus limitaciones son los altos costos en la utilización de mano de equipo y maquinaria pesada muy especializada. En comparación con el concreto pretensado, los cálculos de diseño de elementos de concreto postensados son de mayor complejidad, incluso es diseños simples de hormigón armado. A ello se suma que los componentes estructurales de esta variante se corroen más fácil que el concreto pretensado.
Todo el sistema constructivo requiere inversiones más altas, lo que se debe a que no pueden recuperarse los anclajes y que la instalación de la armadura dentro de los conductos es una tarea demasiado demandante. Igualmente, se requiere mucho cuidado al ejecutar tanto recubrimientos como anclajes de armadura. Todo esto hace que el concreto pretensado sea más solicitado para la mayoría de construcciones, aunque el hormigón postensado es útil en algunos casos.
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